PR3271010/GRUPO 29
En nuestro país, el Periodismo non-profit -sin ánimo de lucro- está aprendiendo a andar. Eso sí, los augurios son inmejorables: inmersos en la requeteoída crisis mediática, este movimiento -o revolución- es el futuro. En el resto del mundo existen varias iniciativas de ésta índole y está consolidado, tanto que cuenta con un Pulitzer en sus vitrinas.
De la misma manera que no otorga beneficios, este tipo de Periodismo no puede suponer elevados costes -véanse gastos de impresión en papel o una licencia de TDT, por ejemplo-. La neutralidad de la red es una de las claves. La esencia de Internet: navegar sin trabas ni priorizar el acceso al proveedor de contenidos que le interese a las empresas de Telecomunicaciones.
PAULLOP.ES
El otro factor imprescindible son las ganas de algunos jóvenes y emprendedores periodistas por hacer Periodismo del bueno. Es el caso de Pau Llop, periodista alicantino, licenciado en Barcelona, afincado en Madrid y cofundador -hace tres años y medio- de Bottup, el primer periódico ciudadano en España.
Bottup es el máximo exponente de Periodismo no provechoso en español. El nombre viene dado por la expresión inglesa “From Bottom Up”, o lo que es lo mismo, “desde abajo hacia arriba”, justo su cometido. La idea de Llop consiste en involucrar a cualquier persona en el primer paso del proceso de comunicación. Después, los periodistas de la empresa contrastan y verifican la información, hacen la corrección ortográfica y convierten el texto recibido en noticia publicable. Periodismo amateur transformado en Periodismo profesional.
¿Otro Periodismo es posible? Viene de camino.
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